«La voz de la Resistencia» es un proyecto de la organización Intered, en el que no colabora MAIZCA pero que mostramos aquí porque compartimos la misma filosofía (el empoderamiento, la mujer maya, Guatemala).
El fenómeno del analfabetismo en Guatemala, más que un problema de carácter educativo, es de exclusión histórica que ha impedido el derecho al acceso a la educación a una gran cantidad de población indígena. Entre el 65% y 70% de las mujeres y niñas indígenas se ven afectadas por el analfabetismo.
Nazaria Tun Sanic, dirigente indígena guatemalteca maya k’iché, es fundadora y presidenta de “La Voz de la Resistencia”, ha sido durante 14 años representante nacional e internacional de las comunidades mayas y es defensora de los derechos de las mujeres indígenas, sobre todo de la alfabetización bilingüe a las comunidades.
¿Qué objetivos tiene la Voz de la Resistencia?
Tras el fin del conflicto armado en 1996, las mujeres nos reorganizamos y en 2005 creamos la organización. Luchamos contra el machismo, tanto de la sociedad como de las autoridades. Existe discriminación hacia las mujeres, pero mucho más en las mujeres indígenas; doblemente discriminadas por el sistema, pero también por su idioma originario. Las mujeres tenemos derecho a disponer de nuestros espacios y a participar en la toma de decisiones de nuestras comunidades. Queremos que se nos escuche y tengan en cuenta lo que pensamos.
Tenemos 5 ejes de trabajo: 1) el fortalecimiento del poder local de las mujeres. Trabajar la historia vivida de un conflicto de 36 años en Guatemala; los jóvenes no saben de esa situación y no queremos que la historia quede en olvido. Queremos que sepan del esfuerzo y la lucha que hicimos las madres en el conflicto. 2) El programa de alfabetización. La formación sobre los derechos de las mujeres, su participación ciudadana, la equidad e igualdad de género, y la violencia intrafamiliar. 3) La salud alternativa, recuperar las plantas medicinales. Las mujeres procesemos plantas para el uso de la comunidad y evitar la medicina química. 4) La convivencia con la naturaleza, cuidarla y defenderla. Manejar el agua y el reciclaje de la basura. 5) La producción, la economía de las mujeres en la economía alternativa.
Trabajan en 30 comunidades rurales de 6 municipios y 4 departamentos de Guatemala ¿Cómo es la labor de alfabetización?
Tenemos un programa de alfabetización bilingüe para mujeres adultas y jóvenes a través del Convenio de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID) e InteRed, donde queremos fortalecer por medio de la educación, la base comunitaria de las mujeres para que conozcan las funciones que pueden tener dentro de la sociedad. Enseñamos a leer y escribir a las mujeres que nunca han tenido la oportunidad de aprender en la escuela cuando eran niñas y jóvenes. Vemos la necesidad de que las mujeres asuman cargos dentro de las comunidades, para que ellas puedan ejercer su responsabilidad como lideresas.
Estamos muy contentas porque hemos tenido el primer grupo de mujeres que han completado el curso de sexto de primaria. Y la verdad es que tenemos veinte veces más demanda de lo que podemos ofrecer, esperamos satisfacerlas con el tiempo. Aunque nos centramos en las mujeres, también hay hombres que quieren ir a la escuela y recibir educación. Lo cierto es que el programa de alfabetización es todo un logro.
¿Cómo responden las comunidades a los procesos de alfabetización?
Las comunidades nos tienen en cuenta y los hombres empiezan a aceptar que las mujeres participen en la vida pública. Incluso algunos pocos se ocupan de las labores de la casa cuando la mujer está en la escuela. Tenemos que luchar más a nivel regional, en las municipalidades. Tenemos que demostrar que somos capaces de sacar adelante el trabajo en casa, la producción de nuestras plantaciones y nuestra presencia en la vida pública.
¿Cómo explica la necesidad de la solidaridad?
Hay que hacer un trabajo de sensibilización en España para que tengamos un apoyo moral y también económico. Para nosotras es muy importante la solidaridad y el apoyo, para formarnos y luchar por nuestros derechos. Ahora tenemos el problema de que empresas nacionales y transnacionales mineras y eléctricas han llegado a los territorios de las comunidades provocando enfermedades y las tenemos instaladas en comunidades que no tienen luz, teniendo una eléctrica a escasos metros. El apoyo moral y el ser comprendidas es para nosotras lo más importante.
VISTO EN canalsolidario.org