El verano pasado estuve en Guatemala con mi familia, a través de Maizca. Y dentro de mi competencia estaba visitar un instituto y compartir con ellos la experiencia que cada cual tenemos.
El instituto donde fuimos se encuentra en la Aldea de Uichu del municipio de Sololá, que es un departamento de Guatemala. El tipo de Escuela es rural y se llama “Nueva Visión”. Tienen horario de 13h a 17h45′, de lunes a viernes. Las vacaciones son en noviembre y diciembre, empiezan a mediados de enero el curso escolar. También tienen una semana libre en semana santa, y en julio una semana de vacaciones.
En la clase donde estuvimos había 13 niñas y dos niños, de 14 a 15 años. Todos ayudan en la familia durante la mañana.
En el instituto había en total 85 niños y niñas. Hay un profesor por materia y las clases se daban en español; también estudiaban la lengua materna que es el caqchiquel.
No tienen ordenadores, tienen dos patios, y una biblioteca. Hacen fiestas para conseguir fondos para material escolar.
Los niños y niñas de la clase nos representaron dos baile típico con los trajes típicos, que luego nos explicaron que uno simulaba una caza y otro era un ritual de agradecimiento a la madre tierra por todo lo que nos da.
Lo que mas me ha llamado la atención es que tuvieran que ir desde tan lejos al instituto, pues una chica tardaba andando desde su casa al instituto una hora
Lo que mas me ha gustado es el baile que representaron porque tenía mucha expresividad.
Lo que menos me ha gustado es que en las vacaciones tengan que trabajar con sus padres.
Me sentí observado y algo nervioso al principio. Y al final satisfecho por realizar la tarea encomendada.
Me sorprendió los pocos recursos materiales que tienen y lo respetuoso que son los alumn@s con su cultura maya típica.
La experiencia me ha parecido una mezcla de culturas excelente.

Yo les conté mi experiencia en mi instituto: estudio de idiomas (francés con intercambio e ingles) horarios, organización por edades y forma de repetir si no apruebas. A ellos les sorprendió que no repitieran si no aprueban.
Con respecto a las comidas probé algunas y me gustó mucho las tortita de maíz, que podíamos comprar recién hechas todos los días; las pupuchas de queso, que son tortitas de maíz rellenas de queso y el pollo campero que es una franquicia como MacDonal, pero todos los productos están elaborados con pollo criollo, que está muy rico y jugoso.
Sorprendía ver tantos tipos de frutas: papaya, mango, durazno, granadilla, coco, melón, aguacates, bananos, fresas… verduras como la yuca, espinacas, calabacín de mucha variedad, los tipos de frijoles (negro, blanco, rojo, con pintitas)

También acompañamos a nuestros padres en la supervisión de los proyectos que colabora Maizca: en alfabetización, bancos comunales de mujeres, parcelas sostenibles, … impresiona lo bien organizados que están y muy agradecidos con Maizca por darles la oportunidad de aprender y colaborar en la subsistencia de sus familias.

Al viaje le pongo un nueve: medio punto se lo quito por los mosquitos en El Peten y otro medio punto por las instalaciones de las duchas y bater de la Cooperativa Nuevo Horizonte donde estuvimos.
Lo que más me ha gustado: Lago Atitlan, los volcanes y paseo en barca en los dos lagos, Atitlan y Flores, Las ruinas y selva del Tikal, pollo Campero y las personas que conocí en Guatemala a través de Maizca.

DANIEL MORA SERRANO (14 años)